El actor venezolano Manuel “Coko” Sosa esperó el día de su cumpleaños para formalizar su regreso a la vida pública luego de que culminó su condena por su vinculación a un entramado de corrupción en la Faja Petrolífera del Orinoco, en el estado Anzoátegui.
Aunque había tenido cierta interacción en su cuenta de Instagram, no fue sino hasta el pasado 28 de octubre cuando el artista, protagonista de novelas como Mi Prima Ciela y Natalia del Mar, compartió sin reservas la celebración por sus 39 años de edad.
La fiesta tuvo lugar en el excéntrico restaurante Salvaje de Las Mercedes, capital de la Venezuela premium, con una amplia vista a la ciudad de Caracas. Contó con la presencia de María Gabriela Chávez, hija del fallecido presidente Hugo Chávez, y de Elvis Amoroso, contralor general de Nicolás Maduro.
En la primera foto aparece Coko Sosa junto a María Gabriela.
Y, en la otra, aparecen Jesús Amoroso, hijo del contralor general, junto a su padre, y Sebastián Ochoa, de la Cámara de Paz de Colombia.
La celebración fue el 28 de octubre en el restaurante Salvaje de Las Mercedes. pic.twitter.com/5hQW1UM6aR
— Directo a la Fuente (@directolafuente) October 29, 2022
En el lugar también estuvieron Jesús Amoroso, uno de los hijos de Elvis Amoroso que se hace llamar Duke, junto a su esposa Daniela Linares. Por el “cumpleaños feliz” detonaron fuegos artificiales, que llamaron la atención de los habitantes de la ciudad.
La “carita bonita” del chavismo
El Coko Sosa destacaba como una de las “caritas bonitas” de la televisión venezolana. Eso hasta que expresó públicamente su inclinación política y comenzó a ganarse el rechazo de muchos venezolanos.
Llegó a decir que Hugo Chávez era “el papá de los helados”, se le vio en varias ocasiones junto a María Gabriela Chávez, incluso se especuló que tenían un romance. Tampoco dudó en apoyar a Maduro y en ignorar la agobiante crisis en el país que hasta ahora ha provocado la migración de 7 millones de venezolanos.
En las imágenes de arriba aparece Coko Sosa acompañado de Jesús Amoroso, hijo del contralor general, y de su esposa Daniela Linares.
Aparentemente, el actor es muy cercano a los Amoroso.
En las siguientes fotos, está junto a Jesús, quien se hace llamar el Duke, en la playa. pic.twitter.com/N09LVy6jG3
— Directo a la Fuente (@directolafuente) October 30, 2022
En años pasados, el actor aseguró durante un acto televisado que todo lo que tenía lo logró con “trabajo humilde y esfuerzo propio”, aunque los hechos que ocurrieron después dieron luces de lo contrario.
“Todo lo que digo es porque lo estoy sintiendo. Toda mi vida me he dedicado a trabajar humildemente y a ganarme las cosas por mí mismo, nadie me las ha regalado. Me he dedicado en una labor muy bonita que, con el tiempo, la llegué a amar profundamente y es la actuación”, expresó.
Coko Sosa admitió su responsabilidad
El actor venezolano, de acuerdo con la información oficial, admitió su responsabilidad en un esquema de corrupción en la Faja Petrolífera del Orinoco. Contó con la bendición de su director Pedro León, conocido como el Zar de la Faja.
Sosa, a través de dos empresas fantasmas que estaban a su nombre consiguió 10 contratos con sobreprecios que alcanzarían los 27 millones de dólares. Entre esos contratos estaba la adquisición de equipos de telecomunicación, material para la fabricación de líneas de agua, impresoras, piezas de taladro, bebidas, alimentación y otros.
El fiscal general del chavismo Tarek William Saab anunció en octubre de 2017 la detención de Sosa. Lo acusaron de peculado doloso propio, concierto de funcionario con contratista y asociación.
Las autoridades le impusieron una multa de 40% del daño patrimonial superior a los 2 millones de dólares que causó a la compañía petrolera Petropiar. Además, se le inhabilitó políticamente para ejercer cualquier cargo público durante cinco años (vence en 2023) y también le bloquearon y le inmovilizaron sus cuentas bancarias.
Hasta la fecha se desconocen las condiciones en las que cumplió condena. No se sabe si estuvo recluido en un centro penitenciario o si recibió el beneficio de casa por cárcel.
Funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar lo capturaron el 4 de octubre de 2017 en la urbanización Las Mercedes del estado Miranda.